Por estos días en la
barriada del Golfo como conocemos los bayameses este reparto, un arbusto se ha hecho popular, por sus
apetitosos frutos que unos llaman peras, por su gran parecido a esta fruta, y otros albaricoque, pertenece a Oraima mi vecina que fue quien lo sembró y
cuida. Con orgullo ella ofrece en cada cosecha una cesta de estos a cada
familia del edificio para que cada cual lo consuma como prefiera.
Los frutos, pueden ser degustados
de forma natural y en jugos, también prepararlos
en dulces de almíbar y algunos ya lo
utilizan en la elaboración del aliñao, bebida característica de esta región oriental
de Cuba.
Lo cierto es que se trata de
una planta exótica de la cual tengo información, la podemos encontrar en Guantánamo,
específicamente en Baracoa, (de donde se trajo la postura de este
árbol), Santi Spíritus y seguramente
en otras zonas del país.
Se dice que es una planta
oriunda de Suramérica, donde se les atribuyen propiedades medicinales como es
el tratamiento del dengue por su capacidad de subir las defensas.
Este es un fruto gradable y de mucho interés, logrado por una mano prodigiosa que siempre está dispuesta a plantar otro
árbol por la vida y si da frutos mejor, nos orgullese a todos ,
pues así como mi vecina contribuiremos al cuidado y conservación del medioambiente que el 5 de junio celebró su día mundial.