viernes, 30 de marzo de 2018

Amor por una profesión


 
Hoy escribo estas líneas que tenía pendientes, oportunidad en que  los periodistas de Granma,  compartimos,  reflexionamos, recordamos, nos apretamos las manos y trazamos pautas para un futuro inmediato.
Materializamos acciones de diversos matices:
*Tengo una historia que contar, momento concebido como homenaje a Roberto Arnaldo Paneque, quien dedicó parte de su vida a la labor periodista, caracterizado por su peculiar modo de escribir, su estirpe de revolucionario, el humanismo como rasgo distintivo, amigo del Che y Camilo, estudioso incansable de la historia y uno de los primeros lectores de la obra de la Novia de Bayamo, Lucía Muñoz.
*Encuentros de Reporteros de Guerra con Rafael Martínez, Ismael González y  Pedro Mora, colegas que expresaron sus experiencias en las disímiles circunstancias donde pusieron a prueba  coraje y profesionalidad.

 
*Entrega de premiaciones a lo más ilustre del Periodismo de la provincia: Evaristo Tamayo y Juan Farrell, quienes invitaron a los más jóvenes a esforzarse y entregarlo todo por la labor reporteril. 


 
*Trabajo  voluntario, donde el surco se apoderó de toda la energía de nuestro equipo, limpia de pepinos, lechuga, siembra de boniato, así colaboramos con el programa alimentario.
*Intercambio entre féminas, ocasión oportuna para que Odalis, Iliana, Elisa, Gisell, Alina, Leslie, Maricela, Sara....  comentaramos, en un ambiente nada formal, mensajes a las nuevas generaciones sobre la significación y el valor de la familia,  la importancia en la formación de nuestros hijos. Allí sonreímos y alzamos nuestras voces llenas de orgullo por todas las bondades  que disfrutamos en una sociedad como la cubana.
 
      
Hoy coincido y afirmo que la profesión del Periodismo necesita de nosotros, hombres y mujeres que conocen, aman  y conquistan con su profesión cada jornada.